En un mundo globalizado como el actual, nuestra página web es nuestro mayor escaparate. Gracias a ella podemos alcanzar público objetivo procedente de cualquier parte del mundo. Por eso, es sustancial invertir en un buen diseño web que sea actual y, a su vez, represente nuestros valores de marca y nuestra identidad corporativa. Para ello no sirve cualquier diseño web. Aunque existen diferentes plataformas como Wix que nos permiten realizar una página sencilla, un buen diseño web es aquel que transforma nuestra página en una herramienta digital completa y efectiva, que nos permitirá lograr un mayor alcance y visibilidad.
Por lo tanto, cualquier estrategia de marketing digital debe comenzar por el análisis de nuestra página web y, si fuese necesario, el rediseño de la misma. En Xinxeta somos expertos en diseño web. Ven a visitarnos y te asesoraremos en el diseño o rediseño de tu página.
El diseño web siempre debe tener un objetivo
A la hora de desempeñar un sitio web siempre debemos tener claro qué objetivos queremos conseguir. Ya sea una página corporativa, una tienda online, un blog personal o una landing page, debemos desarrollar exhaustivamente aquellas metas que pretendemos lograr, así como marcarnos fines a corto y medio plazo.
Es decir, dependiendo de a qué queramos destinar nuestro sitio web, este habrá de cumplir con unas necesidades u otras. En caso de ser una tienda online, la página web deberá servir para generar una experiencia de compra positiva; si, por el contrario, nos encontramos ante una página corporativa, esta tendrá como función reforzar la identidad de la empresa, así como definir sus valores de marca.
Lanzar una página web sin tener desarrollado un objetivo completo y con la finalidad de abarcarlo todo, tan solo conseguirá desdibujar nuestra estrategia de marketing y confundir a nuestros clientes potenciales.
Por eso, contar con una agencia de diseño web es fundamental. Las agencias suelen disponer de un equipo de profesionales capaces de identificar las necesidades de los clientes, transformarlas a ideas concretas y materializarlas en metas alcanzables a corto o largo plazo.
Si diseñamos un sitio web sin tener clara nuestra estrategia general, lo más probable es que acabemos teniendo una página caótica y disfuncional. Sin embargo, al diseñar con un objetivo en mente, todos los elementos estéticos y funcionales girarán en torno al correcto desempeño de dicho objetivo.
Primero la página web, después las redes sociales
Aunque las redes sociales están actualmente en el centro de muchas estrategias de marketing, la página web sigue siendo el máximo indicador de profesionalidad para una empresa. Es decir, pese a que muchas corporaciones apuestan por una fuerte presencia y actividad en redes sociales y, aunque implementar acciones en diferentes redes sociales es fundamental, una buena página web es la máxima representación de nuestros valores y nuestra identidad.
Mediante el diseño web y la posterior utilización de las diversas herramientas, nuestro sitio web nos permite alcanzar metas en materia de posicionamiento SEO, publicidad en buscadores e incluso aumentar nuestra visibilidad en redes sociales.
Por este motivo, una correcta estrategia de marketing pasa por analizar y satisfacer nuestras necesidades como marca a través de las diferentes plataformas disponibles, siendo nuestra página web la piedra angular de todas ellas.
Gracias al diseño web lograremos un mayor posicionamiento, aumentar las ventas, mejorar nuestra imagen de marca o ilustrar a la audiencia, pero, sobre todo, conseguiremos no caer nunca en la intrascendencia.
El usuario en el centro de nuestra estrategia
A la hora de llevar a cabo un diseño web efectivo y funcional cabe cuidar dos aspectos fundamentales:
– La experiencia del usuario. Es fundamental que el usuario que navegue por nuestro sitio web tenga una experiencia sencilla y agradable. Esto pasa por estructurar nuestra página web para que los usuarios puedan disfrutar de todos sus elementos sin sentirse abrumados. Estimular y guiar al usuario por nuestra interfaz nos permitirá, además, dirigir su atención hacia aquellos productos, servicios o información que queremos destacar.
– Velocidad de carga. Los usuarios buscan cada vez más inmediatez en todo aquello que consumen online, ya sea a través de páginas web o redes sociales. Por eso nuestra página web debe disponer de una buena velocidad de carga. Optimizando todos los elementos y recursos de nuestra página web lograremos que el usuario navegue por nuestra web con fluidez y sin desesperarse ante apartados o imágenes que cargan demasiado lentas.
En definitiva, una página web desarrollada por profesionales del sector es aquella que trasciende las competencias básicas, convirtiéndose en una herramienta digital que nos permite alcanzar nuestros objetivos y aumentar nuestro alcance y visibilidad como marca.